Las localidades de Fitz Roy, Jaramillo y Puerto Deseado fueron incorporadas al Programa de Fortalecimiento y Estímulo a Destinos Turísticos Emergentes (PROFODE) que, desde el año 2008, impulsa la Subsecretaría de Desarrollo Turístico del Ministerio de Turismo de la Nación. Por eso desde el próximo 15 de febrero un equipo de expertos del Ministerio acompañados por personal de la Secretaría de Estado de Turismo de Santa Cruz y de los municipios involucrados comenzarán a realizar los trabajos de campo en la zona junto a los actores que intervienen en la actividad turística contando para el cierre de esta jornadas con la presencia del Secretario de Turismo, Alexis Simunovic y la Subsecretaria de Desarrollo turístico del Ministerio de Turismo Lic. Valeria Pelliza.
Los mencionados destinos santacruceños, cuya postulación fue promovida desde la dirección general de Programación y Planificación de la secretaría de Turismo de Santa Cruz a fines del año 2009, serán beneficiarios del citado plan que tiene entre sus objetivos incrementar la capacidad de gestión turística del destino; revitalizar los trabajos de planificación turística y proyectos existentes en el haber de las comunidades locales; afianzar relaciones institucionales entre el sector público y privado y otros actores relevantes para el desarrollo de proyectos turísticos; mejorar la oferta turística del destino; promover el emprendedorismo nacional y el tejido empresarial, a fin de optimizar el funcionamiento y el aprovechamiento de la capacidad instalada y consolidar la identidad local procurando la conservación del patrimonio natural y cultural. El programa se encuentra en consonancia con la estrategia de redireccionamiento de flujos turísticos para el crecimiento equilibrado de la actividad en nuestro país, observando una clara correspondencia con las premisas que sostiene el Plan Federal Estratégico de Turismo Sustentable 2016 (PFETS). Asimismo, posee como ejes rectores que atraviesan todas sus acciones la mejora de la calidad de vida de la población local; el desarrollo sustentable e inclusión social; el afianzamiento de la identidad local y la interculturalidad y el respeto por el patrimonio natural y cultural.
Las acciones de fortalecimiento que se definen en cada implementación son consensuadas previamente con los gobiernos locales. El período de implementación del PROFODE es de dos años en cada destino.
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